Balbino Perez Cejuela
La Ducha Mañanera
Cada mañana el objetivo se hace presente con el convencimiento de que la energía sexual ha dormido conmigo en el mismo letargo. Pero al amanecer crece el deseo de convertir esta energía potencial en energía cinéticas. Los tocamientos realizados dormido durante la noche, son el preludio de consumar el deseo bajo el agua caliente. Las características de este proceso tienen como objetivo alcanzar el orgasmo, donde el pleno gozo y el placer no tienen como fin eyacular, pero sí expulsar líquido preseminal “a chorros”, aunque esta expresión pueda parecer exagerada. En todo momento el placer está garantizado y tampoco es imperativo llegar a la explosión orgásmica. La energía sexual aparentemente dormida, tiene un feliz despertar en las mañanas pasadas por el agua regeneradora.
En estas duchas mañaneras yo no canto, pero sí jadeo libremente mientras me dejo acariciar por el riego de la alcachofa.
Todos los elementos que integran el cuarto de baño íntimo de la ducha, se ponen al servicio del deseo sexual y erótico. Desnudo con el máximo caudal regando desde mi cabeza hasta los pies, voy sintiendo poco a poco el calor del agua y la presencia del vaho producido por el agua caliente que invade el frío de la mañana. Desde el comienzo los pezones son puntos erógenos enjabonados y suavizados por el gel de baño. Una goma abrazada al pene y los testículos favorece la erección al contagio del máximo caudal de agua caliente. Yo aguanto y agradezco el agua por encima de lo considerado como normal. Una vez que el miembro toma una cierta consistencia, hago agitar el pene con movimientos pendulares lateralmente. El miembro recibe de esta forma dos toques, con la caída del agua rozando en el glande en sus oscilaciones de izquierda y derecha. Este doble toque produce mucho placer. Mientras mis dedos enjabonados acarician mis pezones al mismo tiempo. Mantengo las piernas abiertas y dejo que el agua de la ducha me excite, sobre todo jadeando y doblando un poco las rodillas. Tanto de frente como de espalda. La nueva ducha me permite regular el mando de forma que si el caudal del agua se estrecha hace más fuerza sobre mis genitales y siento mucho placer en el capullo. Sin abandonar el movimiento pendular. El objetico final no es eyacular o correrse en términos más coloquiales. Es sentir esa energía sexual que se pone en movimiento. Una vez dada por terminada la ducha y una vez secado, utilizo crema de Aloe Vera, y me masajeo el ano, el perineo, el pene y los testículos… Puedo añadir que el chorro de agua caliente sobre mi nuca; recorriendo mi espalda y acariciando mis glúteos, implementan mi estado de excitación corporal...
(*) Expresión catalana. Se conoce popularmente como 'tienda de campaña' a la erección matutina con la que muchos hombres se despiertan y que provoca una elevación de la sábana, ropa interior o pijama que recuerda una de esas carpas de lona que se utilizan para ir de acampada.
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